La sensibilidad dental es una patología común que afecta a muchas personas en todo el mundo. Se caracteriza por una sensación de dolor o molestia en los dientes al entrar en contacto con estímulos como el frío, el calor, los alimentos dulces o ácidos, e incluso al cepillarse los dientes.
Aproximadamente el 40% de la población general sufre de sensibilidad dental, y esta cifra puede aumentar hasta alcanzar al 73% en pacientes con enfermedad periodontal.
Son muchos los pacientes de nuestra clínica dental en Alicante los que nos preguntan acerca de esta patología. Por ello, en este artículo despejamos todas las dudas acerca de la sensibilidad en nuestros dientes.
¡Esperamos que os sea de utilidad!
¿Cómo saber si tienes sensibilidad dental?
La sensibilidad dental puede identificarse gracias a varios síntomas que hacen saltar las alarmas de esta patología:
- Dolor repentino y agudo al consumir alimentos o bebidas frías, calientes, dulces o ácidas.
- Sensación de dolor o molestia al cepillarte los dientes o al usar hilo dental.
- Sensibilidad al respirar aire frío o al airear la boca.
- Sensación de dolor al morder o masticar alimentos.
- Dolor o molestia en dientes específicos, que puede irradiarse hacia otras áreas de la boca.
Si experimentas alguno de estos síntomas con regularidad, es posible que tengas sensibilidad dental. En ese caso, es recomendable que te pongas con nuestros dentistas en Alicante para un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado.
¿Cuáles son las posibles causas de la sensibilidad dental?
Erosión del esmalte dental: El esmalte dental puede desgastarse debido al cepillado forzado, el consumo excesivo de alimentos y bebidas ácidas, el rechinar de dientes (bruxismo) o el uso de productos dentales abrasivos. Esto puede exponer la capa más interna del diente, llamada dentina, que contiene pequeños túbulos que conectan con los nervios dentales, causando sensibilidad.
Recesión de las encías: Cuando las encías se retraen, la raíz del diente queda expuesta. Esta parte del diente no está protegida por esmalte y es más sensible a los estímulos externos.
Caries dentales: Pueden exponer la dentina, aumentando la sensibilidad dental.
Bruxismo: El rechinar o apretar los dientes puede desgastar el esmalte dental, exponiendo la dentina y causando sensibilidad.
Gingivitis o enfermedad periodontal: Las enfermedades de las encías pueden provocar recesión de las encías y exposición de las raíces de los dientes.
Factores genéticos: Algunas personas pueden ser genéticamente más propensas a tener dientes sensibles debido a la estructura de sus dientes y encías.
Cambio hormonal: Los cambios hormonales, como los que ocurren durante el embarazo o la menopausia, pueden aumentar la sensibilidad dental en algunas personas.
Tratamientos para la sensibilidad dental
Como hemos podido ver, las causas de la sensibilidad dental pueden ser varias, unas más graves que otras. Por ello, dependiendo de la causas subyacente, podemos encontrar diferentes tratamientos:
Uso de pastas dentales para la sensibilidad: Existen pastas dentales específicamente formuladas para reducir la sensibilidad dental. Estas contienen ingredientes como el nitrato de potasio o el fluoruro de estaño, que ayudan a bloquear los túbulos dentinales y reducir la sensibilidad.
Cambio en la técnica de cepillado: Es importante cepillarse los dientes con una técnica suave y usar un cepillo de cerdas suaves para evitar el desgaste del esmalte dental.
Evitar alimentos y bebidas ácidas: Limitar el consumo de alimentos y bebidas ácidas puede ayudar a prevenir la erosión del esmalte dental.
Aplicación de barnices o selladores dentales: Los dentistas pueden aplicar barnices o selladores dentales en las áreas sensibles para ayudar a proteger el esmalte dental y reducir la sensibilidad.
Tratamiento de problemas subyacentes: Si la sensibilidad dental es causada por problemas como caries dentales, enfermedad de las encías o bruxismo, es importante tratar estos problemas subyacentes para reducir la sensibilidad.
¿Qué pasa si no se trata la sensibilidad dental?
Si la sensibilidad dental no se trata, pueden ocurrir varias consecuencias negativas a largo plazo:
Deterioro del esmalte dental: Si no se trata, esto puede llevar a un mayor deterioro del esmalte, lo que aumenta el riesgo de caries y otras enfermedades dentales.
Dolor y malestar continuo: Puede provocar dolor y malestar persistentes al comer, beber o cepillarse los dientes. Esto puede afectar la calidad de vida y dificultar la realización de actividades diarias.
Mayor sensibilidad: Si no se trata, la sensibilidad dental puede empeorar con el tiempo, ya que el esmalte dental continuará desgastándose y exponiendo la dentina, lo que aumenta la sensibilidad a los estímulos externos.
Problemas periodontales: Al no tratarse la sensibilidad dental, los problemas periodontales pueden empeorar y provocar recesión de las encías, pérdida de hueso y eventualmente la pérdida de dientes.
Consejos para evitar sensibilidad en los dientes
- Cepillado suave
- Usar una pasta de dientes adecuada
- Evitar alimentos y bebidas ácidas
- Limitar los alimentos azucarados
- Si tienes bruxismo, usar el protector bucal
- Reducir el uso del tabaco
- Usar enjuague bucal
Sin embargo, lo más importante para evitar la sensibilidad dental es programar revisiones dentales periódicas en tu dentista más cercano para detectar y tratar problemas dentales a tiempo. Además, te aconsejarán sobre cómo prevenir otras patologías.
Al tratarse de una de las patologías más frecuentes en nuestra clínica odontológica en Alicante, contamos con los mejores avances, técnicas y equipo para poder ofrecerte una solución que cambie tu sonrisa.
Preguntas frecuentes sobre la sensibilidad dental
La sensibilidad dental puede afectar a personas de todas las edades, pero es más común en adultos jóvenes, ya que es probable que hayan experimentado más desgaste dental y recesión de las encías debido a años de cepillado y hábitos alimenticios.
Algunos remedios caseros pueden proporcionar alivio temporal, pero es importante consultar a un dentista para un diagnóstico adecuado y un tratamiento efectivo, ya que algunos remedios caseros pueden empeorar el problema.
Desde luego, nosotros no lo recomendamos.
Sí, es común experimentar sensibilidad dental después de un blanqueamiento dental, ya que el proceso puede causar irritación temporal en los nervios dentales. Sin embargo, esta sensibilidad suele ser temporal y desaparece en unos días.
En algunos casos, la sensibilidad dental puede disminuir o desaparecer por sí sola si se identifica y se corrige la causa subyacente, como el cambio de una técnica de cepillado agresiva. Sin embargo, si persiste, es crucial buscar atención dental profesional.